Dossier temático

Arquitectura escolar en el siglo XX: aproximaciones desde cuatro publicaciones latinoamericanas recientes

20th Century School Architecture. Approaches from Four Recent Latin American Publications

María Florencia Serra (*)
CONICET. Universidad Nacional de Rosario, Argentina
Florencia Fernández Méndez (**)
CONICET. Universidad Nacional de Rosario, Argentina

A&P continuidad

Universidad Nacional de Rosario, Argentina

ISSN: 2362-6097

ISSN-e: 2362-6089

Periodicidad: Semestral

vol. 7, núm. 13, 2020

aypcontinuidad01@gmail.com

Recepción: 25 Agosto 2020

Aprobación: 20 Octubre 2020



DOI: https://doi.org/10.35305/23626097v7i13.285

CÓMO CITAR: Serra, M. F. y Fernández Méndez, F. (2020). Arquitectura escolar en el siglo XX: aproximaciones desde cuatro publicaciones latinoamericanas recientes. A&P Continuidad, 7(13). https://doi.org/10.35305/23626097v7i13.285

Resumen: En el presente artículo intentamos indagar sobre la construcción de la arquitectura escolar como tema de investigación en la última década en Latinoamérica, desde el cruce de dos miradas provenientes de los campos de la arquitectura y de la pedagogía. Para tal fin, describimos y analizamos cuatro publicaciones recientes que, desde enfoques disímiles, coinciden en dar cuenta de la arquitectura escolar construida en el siglo XX en Argentina, Uruguay, Chile y México. En este sentido, estudiamos algunos modos, enfoques, cuestiones discursivas y diálogos que entablan con otras disciplinas, como la historia y la pedagogía. Las publicaciones, presentadas entre 2008 y 2015, significan aportes relevantes en el estudio de la arquitectura escolar en cada país, en cuanto lo hacen desde una mirada panorámica y permiten habilitar futuros abordajes y cruces disciplinares.

Palabras clave: arquitectura, educación, publicaciones latinoamericanas contemporáneas.

Abstract: The aim of this paper is to deal with school architecture throughout the last decade in Latin America as a research topic by means of the interweaving of the pedagogical and architectural perspectives. In order to achieve this end, we describe and analyze four recent publications that -from different approaches- are coincident when giving an account of 20th century school architecture in Argentina, Uruguay, Chile and Mexico. Thus, we address concerns, inquiries, speeches and conversations with other sciences such as history and pedagogy. These works -published between 2008 and 2015- represent significant contributions to the study of each country’s school architecture due to a comprehensive view that may give rise to future interdisciplinary approaches.

Keywords: architecture, education, Latin American contemporary publications.

Introducción

Durante las primeras décadas del siglo XXI se han ampliado considerablemente los estudios que construyen a la arquitectura escolar como tema/problema específico desde variadas disciplinas como la arquitectura, la pedagogía y la historia (Cattaneo y Espinoza, 2018; Serra, 2017, Ortega Ibarra y Dussel, 2019, entre otros). En la línea de esos trabajos, producidos en sede latinoamericana, presentamos el análisis de cuatro publicaciones de Argentina, Chile, México y Uruguay. Los textos, singulares en sus objetivos, destinatarios y contextos de producción, coinciden en ser presentados en el período reciente –entre 2008 y 2015– y dan cuenta de una preocupación compartida por entender la arquitectura escolar como tema de investigación. Si bien no son los únicos trabajos que realizan este tipo de abordajes, podrían pensarse como inaugurales en cada uno de sus países.

Interesa explicitar que los cuatro textos seleccionados tienen ámbitos de producción disímiles, lo cual a priori dificultaría una comparación en términos estrictos. Algunos son objetos de investigaciones iniciales; otros, resultados de investigaciones sostenidas en la temática. Los recorridos que realizan y la presentación y selección de la información también es particular en cada publicación. Sin embargo, los cuatro libros coinciden en detectar, en los últimos años, el vacío existente en la producción de conocimiento de la arquitectura escolar como objeto de investigación a escala nacional. Por ello, también coinciden en proponer un abordaje panorámico de la arquitectura escolar en cada país y comparten el recorte temporal de estudio; cuestión que habilitaría la posibilidad de mirarlos en conjunto. Son publicaciones organizadas y/o escritas por arquitectos/as principalmente, que indagan en la arquitectura escolar del siglo XX. Nos referimos a Arquitectura Escolar. SEP 90 AÑOS de Axel Arañó (Ed.), México, 2011; Interacciones entre las prácticas proyectuales y las ideas educativas en el Uruguay moderno y contemporáneo, de Pedro Barrán Casas, Uruguay, 2008; Arquitectura, educación y patrimonio. Argentina 1600 – 1975, de Fabio Grementieri y Claudia Shmidt, Argentina, 2010; y, Arquitectura escolar pública como patrimonio moderno en Chile. Registro y análisis de las obras construidas por la “Sociedad Constructora de Establecimientos Educacionales” en la zona centro del país. 1937-1960, de Claudia Torres Giles, Soledad Valdivia Ávila y Maximiano Atria Lemaitre, Chile, 2015.

Nuestro objetivo es aproximarnos a estos textos, analizando su posicionamiento para construir el tema, sus enfoques y aquello que eligen exponer respecto a la arquitectura escolar de su país ante una siempre necesaria estrategia de recorte y selección. Considerando las singularidades de cada abordaje, y también la mirada panorámica del propio país, indagamos en las formas en que este objeto de estudio es construido, los recursos a los que se acude, las voces que aparecen, los lenguajes que se despliegan, la estructura de análisis que plantean, los puntos en los que se focalizan, las relaciones entre disciplinas y la sistematización que proponen. Exploramos también en las relaciones entre arquitectura, educación y Estado; y nos proponemos detectar marcas pedagógicas y arquitectónicas en cada uno de ellos.

Hacia una mirada panorámica: características de las cuatro publicaciones

Portadas de las
publicaciones. De izquierda a derecha: Grementieri y Shmidt (2010); Barrán (2008);Torres Gilles et al. (2015) y Arañó (2011.)
Figuras 1, 2, 3 y 4
Portadas de las publicaciones. De izquierda a derecha: Grementieri y Shmidt (2010); Barrán (2008); Torres Gilles et al. (2015) y Arañó (2011.)

Arquitectura y educación en Argentina. Un enfoque de lo patrimonial desde la mirada de Grementieri y Shmidt

El libro Arquitectura, educación y patrimonio. Argentina 1600-1975 (Fig. 1) fue publicado en el año 2010 por Fabio Grementieri y Claudia Shmidt, en la editorial Pamplatina. En la presentación del libro, Nelly Arrieta de Blaquier (reconocida coleccionista de arte argentina que auspició esta publicación) valoró la importancia de difundirlo en versión impresa y digital, para asegurar una mejor llegada a las instituciones educativas del país. Este libro da cuenta de la confluencia de la actividad de dos investigadores especialistas, ambos arquitectos argentinos que han ejercido la docencia en diferentes instituciones, con importantes publicaciones realizadas. Grementieri cuenta con una destacada trayectoria de actividad profesional (en el Estudio Baez Carena Grementieri A-E) y desde la perspectiva patrimonial en tanto vocal en la Comisión Nacional de Monumentos, Lugares y Sitios Históricos y coordinador del Programa en Preservación y Conservación del Patrimonio, entre otras. Claudia Shmidt, por su parte, desarrolla una sostenida actividad de investigación desde la historia de los espacios públicos (tema sobre el que versa su Doctorado en Historia y Teoría de las Artes, UBA) y ha estudiado sobre la cultura arquitectónica en Argentina y la historiografía de la arquitectura moderna y contemporánea en América Latina. También ha dirigido la Maestría en Historia y Cultura de la Arquitectura y la Ciudad (UTDT).

El objetivo de la publicación gira en torno a la exposición desde lo que los autores llaman un abordaje sistémico y abarcativo, con la intención de enriquecer la comprensión del fenómeno que significa crear una escuela. El relato se estructura a través de un registro temporal y geográfico y se destacan referencias a la propuesta pedagógica para la cual son construidos los edificios. Con fuertes intereses por el recorrido histórico y patrimonial, analizan más de 160 casos de escuelas, de distintos períodos y puntos del país.

Dentro de las fuentes expuestas figuran: revistas de arquitectura, ingeniería y educación; normativas edilicias y planos pertenecientes al Consejo Nacional de Educación; archivos, documentos y fotografías de ministerios y secretarías provinciales; distintas instituciones (estatales y privadas, provinciales y nacionales), escuelas, universidades, museos; y el aporte de variados profesionales de diferentes puntos del país. Como herramientas gráficas recurren a fotografías de archivo y contemporáneas, planos, perspectivas, axonometrías, detalles, recortes de publicaciones y postales del período estudiado.

Asimismo, enumeran las construcciones a partir de reglamentaciones legales; describen la forma exterior, la materialidad, los estilos, los lenguajes utilizados, y, en algunos casos, la disposición de aulas, galerías y patios. Valoran obras donde se aprecia el estado original y realizan la identificación de las reformas de preservación patrimonial. Algunos proyectos son descritos, en mayor o menor medida, bajo la lógica de prototipos a los que responden. También se incluyen casos que exceden el programa escolar en sentido estricto, como parques recreativos/ educativos de Buenos Aires.

La publicación finaliza con un proyecto de restauración realizado por arquitectos bajo la dirección de Grementieri. Este cierre permite el diálogo entre el discurso teórico y un caso concreto, reforzando la óptica patrimonial propuesta como lente analítico del trabajo.

Diálogos en torno a los proyectos arquitectónicos para la educación en Uruguay, desde la óptica de Pedro Barrán

La publicación Interacciones entre las prácticas proyectuales y las ideas educativas en el Uruguay moderno y contemporáneo (Fig. 2) del arquitecto Pedro Barrán (2008) surge como resultado de un proyecto de iniciación a la investigación de seis meses de duración (entre 2006-2007), promovido por la Facultad de Arquitectura de la Universidad de la República (UdelaR – Uruguay). Barrán es arquitecto y profesor en dicha facultad, donde también recientemente ha alcanzado e e el grado de Doctor en Arquitectura. Con anterioridad, había realizado una Maestría en Desarrollo Urbano y Territorial en la Universitat Politécnica de Catalunya. Se desempeña también como proyectista de escuelas en organismos públicos (Proyecto de Apoyo a la Escuela Pública Uruguaya), desarrollando Escuelas de Tiempo Completo.

Barrán detecta la ausencia de investigación en el tema y se sumerge en este, al tiempo que construye herramientas metodológicas y teóricas. A lo largo de la publicación, trabajando el período 1800-1970, desarrolla cómo la construcción arquitectónica se hace eco de los debates internacionales en torno a la educación. Rastrea abordajes filosóficos, pedagógicos, psicológicos (entre otros) y acontecimientos políticos, sociales, económicos y culturales para abordar, desde allí, el análisis de las búsquedas proyectuales.

En el inicio de su trabajo expone una línea cronológica (Fig. 5), en la que intenta entablar diálogos entre un total de 35 obras, con 29 publicaciones filosóficas, sociológicas y pedagógicas, para luego analizar en el cuerpo del texto un total de 16 proyectos arquitectónicos.

Cronología (Barrán,
2008, pp. 6- 7)
Figura 5
Cronología (Barrán, 2008, pp. 6- 7)

Barrán anticipa que la metodología utilizada ha sido de carácter inductivo y que consultó bibliografía de arquitectura educativa, así como material de otras disciplinas, planos de proyectos y anteproyectos, visitas y fotografías in situ de las obras estudiadas, entrevistas a directores, proyectistas y técnicos con experticia en el tema.

En la publicación se incorporan recursos gráficos como plantas, cortes, vistas, axonometrías, fotografías y esquemas de procesos proyectuales, y de organización espacial y funcional.

Como en la publicación argentina, Barrán analiza los prototipos planteados por el Plan de Construcciones Escolares bajo una lente común. Se hace referencia a concursos de edificios educativos, a las Escuelas Experimentales, y se exponen cuatro antecedentes internacionales de la arquitectura sistémica en Uruguay, tema que el autor identifica como el de su mayor interés y que luego profundizará en su investigación doctoral (Barrán, 2020). El insumo de la investigación histórica abona la presentación y los análisis en el devenir de los proyectos. Presenta con mayor grado de análisis el caso de La Regional Norte del año 1996/97.

En el final del trabajo describe brevemente las Escuelas de Tiempo Completo en Lavalleja y en Maroñas, de su autoría, que exceden el marco temporal. Si bien aclara que la intención de incluir dichas obras no tiene un fin comparativo con las presentadas, resulta interesante dicho remate que da cuenta de sus búsquedas en el camino de la investigación proyectual.

Arquitectura escolar en Chile: el caso de la Sociedad Constructora de Establecimientos Educacionales (SCEE)

El texto Arquitectura Escolar Pública como patrimonio moderno en Chile. Registro y análisis de las obras construidas por la Sociedad Constructora de Establecimientos Educacionales en la zona centro del país. 1937-1970 (Fig. 3), publicado en 2015, se desarrolló a través de la financiación otorgada por el Fondo Nacional de las Artes (FONDART), el apoyo de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo (FAU) de la Universidad de Chile y el Docomomo de Chile. La publicación tiene la autoría de Claudia Torres Gilles, arquitecta chilena, doctora en Tecnología de la Arquitectura, Edificación y Urbanismo (Universidad Politécnica de Cataluña) y docente en la FAU de la Universidad de Chile. Presenta como coautores a los arquitectos Soledad Valdivia Ávila (doctora en Arquitectura y Urbanismo, Universidad Politécnica de Madrid y asesora en el Departamento de Patrimonio en el Ministerio de Obras Públicas de Santiago de Chile) y a Maximiano Atria Lemaitre (Magíster por la Pontificia Universidad Católica de Chile, investigador y profesor en la Facultad de Arquitectura y Urbanismo, Universidad de Chile). Los tres autores cuentan con una valiosa producción teórica y variadas publicaciones vinculadas al tema del libro. La investigación es el resultado de un trabajo sostenido de un equipo de docentes-investigadores, los cuales participan en la edición, en el diseño y también en la producción gráfica. Se presenta como una compilación de edificios escolares de Chile, que focaliza en aquellos construidos por la Sociedad Constructora de Establecimientos Educacionales (SCEE). Dicha sociedad es una alianza con fondos públicos- privados (1937-1987) encargada de asegurar, en términos de infraestructura escolar, los principios postulados en la Ley de Educación Primaria Obligatoria N° 3654 (1920). El planteo de los autores parte de entenderla como un elemento inescindible en la comprensión de la arquitectura escolar en el país; es la vía de entrada para construir el tema y desde donde se han extraído la mayoría de las fuentes primarias.

Entre los objetivos expuestos, los autores señalan la necesidad de sistematizar las principales obras arquitectónicas a nivel tipológico de Chile, para detectar características “morfológico-espaciales” y la apropiación de postulados modernistas y modelos pedagógicos de la época (Torres Gilles et al, 2015, p. 5).

En la publicación se analizan 165 establecimientos educativos que representan los valores modernistas de la época, ordenados según su contexto urbano y nivel de escolaridad, y se mencionan y comparan tipologías escolares internacionales del siglo XX. Los proyectos seleccionados corresponden a obras nuevas de los primeros 10 años de la SCEE y a los tipos de escuelas primarias promovidas por el Plan de Construcciones de Escuelas Rurales y Suburbanas de 1954. Se realizó un análisis más extenso de proyectos arquitectónicos que, como se aclara en la publicación, figuran en fichas sistematizadas en una plataforma virtual.

Las fuentes primarias utilizadas son informes, decretos y leyes del Ministerio de Educación y de la SCEE; bibliografía arquitectónica; expedientes de obras en municipios; entrevistas a profesionales, a profesores y exalumnos; y relevamientos de los edificios.

Gráfico de barra utilizado en la publicación (Torres
Gilles et al., 2015, p. 23)
Figura 6
Gráfico de barra utilizado en la publicación (Torres Gilles et al., 2015, p. 23)

Mapa esquemático con localización y
cantidad establecimientos escolares (Torres Gilles et al., 2015, p. 112)
Figura 7
Mapa esquemático con localización y cantidad establecimientos escolares (Torres Gilles et al., 2015, p. 112)

Ejemplo de planilla y fichaje de obras
utilizada por los autores (Torres Gilles etal., 2015, p.125).
Figura 8
Ejemplo de planilla y fichaje de obras utilizada por los autores (Torres Gilles et al., 2015, p.125).

Exponen fotografías, plantas, cortes, vistas, axonometrías, gráficos de barra (Fig. 6) y cuadros. Es la única publicación de las cuatro analizadas que presenta planillas (Fig. 8) y mapas con localización geográfica en el país (Fig. 7), dando cuenta de la cantidad de edificios construidos en cada región.

Un encuentro de perspectivas y encuadres para pensar la arquitectura escolar en México

La obra Arquitectura Escolar. SEP 90 años (Fig. 4), publicada en 2011, surge en el marco de la conmemoración de los 90 años de la Secretaría de Educación Pública (SEP) de México. Es una publicación oficial que se propone presentar a los edificios escolares como patrimonio arquitectónico, abonando saldar un vacío sobre el tema. Promovida por dicha Secretaría y por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes es editada por Axel Arañó, arquitecto mexicano y docente de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Nacional Autónoma de México y de la Universidad Iberoamericana. Autor de diversas publicaciones, ha sido fundador de variados estudios de arquitectura desde 1996, desempeñándose en la actualidad en el Taller Fragonard 70 S.C. A su vez, esta obra se compone de ensayos de investigadores de diferentes disciplinas (historia, antropología, artes, entre otras): Luis Porter, Luz Elena Galván, José Miguel González, Natalia de la Rosa, Xavier Guzmán, Ernesto Velasco, Juan Carlos Cano, Elisa Lozano y Héctor Orozco, y del aporte de 13 fotógrafos y artistas plásticos

Entre los objetivos, enuncian la intención de documentar, compilar y analizar obras escolares modelo y otras singulares que componen el patrimonio de espacios escolares de México y reflexionar sobre su rol en ámbitos sociales y culturales.

Cronología de
Escuelas y autores (Arañó, 2011, pp. 374-375)
Figura 9.
Cronología de Escuelas y autores (Arañó, 2011, pp. 374-375)

La publicación presenta una estructura de sistematización según “tendencias decorativas y corrientes arquitectónicas” (Arañó, 2011) seleccionadas por el autor. Abordando el período temporal 1905-2011, presenta un relevamiento gráfico de edificios con fotografías, planimetrías, axonometrías, postales, grabados y afiches de época. En la cronología de escuelas y autores (Fig. 9) se mencionan 55 casos, y luego además cada autor incorpora el análisis de otros, alcanzando un total de 147 escuelas. La selección de obras se organizó tanto desde aquellas existentes en archivos de organismos públicos y en publicaciones sobre arquitectura educativa, como del ejercicio de relevamiento fotográfico. Una particularidad de esta publicación es que presentan, junto al currículum vitae de cada uno de los proyectistas y de los escritores, los de los fotógrafos. Resulta interesante destacar el rol de estos últimos en el abordaje del objeto, al asumir que más de la mitad de los proyectos expuestos en los anexos gráficos corresponden a selecciones de fotógrafos.

Al describir los proyectos estudiados, se presentan referencias artísticas de murales, pinturas o vitrales de fachadas. A su vez, algunos proyectos particulares son enunciados como parte de grupos más amplios. Esto sucede con las Escuelas al Aire Libre de 1925-1926, los proyectos de Más de Veinte Escuelas de 1932, las Escuelas Tipo de 1944 y los edificios para Centros RIA (Red de Innovación y Aprendizaje) y escuelas rurales.

Si atendemos a la manera en que se describen los proyectos y a las herramientas gráficas utilizadas, notamos enfoques particulares en las cuatro publicaciones, propios de sus condiciones de partida, sus organismos financiadores y la experticia de sus autores. En el caso argentino, como en el chileno y mexicano, el trabajar los casos de prototipos estatales ha habilitado a presentar descripciones generales, exponiendo fotografías y planos de proyectos individuales. El caso chileno, al exponer mapas y fichas, apuesta por una estrategia comparativa. Los casos uruguayo y mexicano presentan intenciones disímiles, pero criterios comunes a la hora de incorporar gráficos cronológicos como una estrategia común de aproximación al tema y, tanto en la publicación uruguaya como argentina, se exponen obras arquitectónicas de autoría propia. Estos cierres dialógicos permiten intercambios entre los desarrollos teóricos expuestos y los ejercicios prácticos proyectuales.

Formas de nombrar la arquitectura escolar como objeto de investigación

¿Qué nombran los autores bajo el término arquitectura escolar1? Sin pretender construir una categorización conceptual, nos proponemos indagar en los cuatro trabajos, desde qué conceptos se nombra la arquitectura escolar como objeto de estudio.

En el trabajo de Barrán resulta interesante no haber localizado la expresión arquitectura escolar, aunque la frase que figura con frecuencia es arquitectura educativa, utilizada para referirse a la innovación e investigación de prácticas proyectuales, marcando diferencia entre obras sistematizadas y singulares y la urgencia del intercambio entre proyectistas y educadores. En muchas ocasiones este concepto aparece en diálogo con el verbo proyectar, significando la acción de imaginar un espacio educativo. Otro término allí presente, arquitectura para la educación, refiere a la implicancia histórica, pedagógica y epistemológica de un proyecto arquitectónico y para denominar las propuestas internacionales de sistematización.

En Grementieri y Smith, el término arquitectura escolar es el núcleo conceptual más presente. En la publicación chilena es reemplazado en el cuerpo del texto por arquitectura pública, concepto también utilizado en el trabajo mexicano. Observamos cómo la arquitectura escolar queda vinculada a un proyecto mayor que conduce a pensar en un carácter estatal o público inherente a toda la obra producida por el Estado.

La evocación a la arquitectura escolar se hace presente en el trabajo mexicano desde diferentes voces y búsquedas. Arañó utiliza en reiteradas ocasiones el término planteles educativos y, al referirse a los actores involucrados en el diseño de los espacios, incorpora la variable intersubjetiva utilizando el término arquitectura escolar humana. A su vez, los autores referencian recintos educativos, edificio símbolo, complejo educativo. En este trabajo figuran centros escolares, o centros educativos para hacer referencia a las escuelas ambulantes, a las escuelas rurales y a los Centros RIA.

El término infraestructura escolar es utilizado en las cuatro publicaciones asociado al desarrollo económico de los países y a las construcciones desarrolladas por el Estado. Otro de los conceptos que nos interesa rastrear es el de patrimonio. Este se encuentra vinculado en la obra argentina tanto para referirse a lo escolar como a lo edilicio. En el trabajo chileno al concepto de patrimonio moderno, se le asigna relevancia por su valor arquitectónico y por su valor simbólico en la experiencia cultural y educativa. En la investigación mexicana se alude a la importancia de sistematizar las obras en función de reconocerlas como parte de un patrimonio cultural común.

Indagar en los conceptos más utilizados puede brindar algunas pistas sobre el modo de abordar el objeto y el recorte que se realiza en cada publicación. En términos generales, en el caso argentino hay una predominancia de la variable patrimonial; en el uruguayo, por su parte, al ejercicio práctico de la profesión. En el caso mexicano, se recurre a varios términos (probablemente por ser escrito desde diferentes disciplinas), denotando una fuerte presencia de lo cultural y de la pregunta por lo identitario; y en el caso chileno, predomina la referencia a la figura de lo público.

Arquitectura, educación y Estado. La construcción de escuelas y la formación de una identidad nacional

En el material analizado hay una importante referencia a las relaciones entre arquitectura, procesos de escolarización, fortalecimiento de los Estados-nación y la construcción de una identidad. Tomando como punto de partida el planteo de Grementieri y Shmidt acerca de que el estudio de la arquitectura escolar es un aspecto postergado a la hora de trabajar modelos educativos, sostenemos que las cuatro publicaciones analizadas significan una forma de atender a esa vacancia. Los edificios escolares se presentan como instrumentos de una apuesta política, materializando aspectos simbólicos y culturales que exceden la existencia de una escuela en el territorio.

El siglo XX para muchos países latinoamericanos comienza un poco antes del 1900 con procesos que bregan por el fortalecimiento de los Estados nacionales. Adriana Puiggrós (1994) plantea que, en cuanto al surgimiento y consolidación de los sistemas educativos, sociedades como Argentina y Uruguay atravesaron procesos históricos y sociales semejantes, ligados al significado que la educación escolarizada asumió en el fortalecimiento de los Estados nacionales. En este grupo podríamos incorporar también a Chile. Por su parte, el caso mexicano presentó otras características en cuanto a la articulación entre los grupos de pueblos originarios y el papel del Estado respecto al sistema educativo mexicano (Puiggrós, 1994).

Grementieri y Shmidt, al realizar un recorrido por la historia argentina, presentan elementos que visibilizan la creación de una arquitectura escolar en el país que acentúa la construcción de una identidad nacional. Este proceso involucra la definición de contenidos comunes para la enseñanza escolarizada y, consecuentemente, la homogeneización formal de las edificaciones para tal fin. En palabras de los autores, se dan “los primeros escarceos en torno de la definición de una arquitectura escolar para una nueva nación” (2010, p. 9), y el compromiso de un Estado de desplegar educación pública “que implicaba generar un sistema edilicio como garantía de su éxito” (p. 10).

Para el caso de Chile, Torres Giles et al. proponen el estudio de la arquitectura pública en su país, entendiendo la arquitectura escolar desarrollada como una política de Estado enmarcada en un proceso mayor. Esta forma de abordar la arquitectura escolar, inescindible de procesos políticos y sociales más amplios, es un elemento común en las demás lecturas analizadas para este escrito. Mientras se menciona la historia social y política chilena, se hacen algunas referencias a proyectos pedagógicos y principalmente al marco legal que acompaña el proceso de escolarización. Aquí también, el análisis de la SCEE resulta funcional para presentar las relaciones entre arquitectura, educación y Estado.

Al igual que en otros países de Latinoamérica, la obligatoriedad escolar en Chile se fue consolidando de la mano de la construcción de edificios escolares y la SCEE ocupó un lugar estratégico en esto. Los autores se refieren a la tarea de esta sociedad como un plan de edificación. En ese planteo es posible detectar en la construcción de escuelas una idea de universalidad y sistematización. Esta idea de plan aparece también en los demás casos analizados, por ejemplo, en Uruguay el Plan de Construcciones Escolares, o en México donde “el déficit de espacios escolares hizo evidente la necesidad de establecer un plan nacional” (Arañó, 2011, p. 231). Por su parte, en el caso mexicano y en el chileno se menciona también la participación de distintos grupos en la construcción de escuelas, acompañando la tarea desplegada por el Estado.

En el caso mexicano, los autores analizan las obras arquitectónicas escolares desde un marco estatal, presentándolas como un valioso patrimonio del país y una forma de avanzar en la consolidación de una identidad nacional. Los autores hacen referencias al edificio escolar como un elemento identitario: la escuela como “edificio símbolo” (Porter, 2011, p. 25), los edificios escolares como “un lugar común” (Galván Lafarga, 2011, p. 26). El edificio como materia –la arquitectura consolidada– permite entender a la escuela como un espacio compartido, que se vincula con la pertenencia y la identidad, y se vuelve un lugar donde se despliega una “memoria colectiva” (Galván Lafarga, 2011, p. 26). La apuesta al muralismo en las escuelas aparece como una estrategia para fortalecer un carácter nacional y también regional.

Es el trabajo mexicano el que más se detiene en incorporar aportes de los pueblos originarios (mayas, aztecas), nombrando la presencia y herencia de estas identidades bajo la denominación de estilo neomaya. En el caso argentino se hace referencia a arquitecturas que incorporan prácticas y materiales de la tradición vernácula de las provincias (Formosa, Chaco y Misiones, entre otras). En los cuatro trabajos se alude a la búsqueda común por un carácter propio de la arquitectura escolar que atiende a una pluralidad de estilos, materiales, técnicas y lenguajes, en muchos casos condensadoras de formas e imágenes de corrientes y estilos europeos y norteamericanos.

En el caso uruguayo, también se pone en diálogo la formación de un Estado nación, la configuración de un sistema educativo y el fortalecimiento de las construcciones de edificios escolares. Enfatiza Barrán que en Uruguay la formación del Estado moderno aconteció de la mano de la Reforma Educativa (1877), en tanto antes “las escuelas públicas funcionaban en edificios adaptados para ese fin, generalmente viviendas del tipo “casa estándar”. [...] En la década de 1880 se construyen los primeros edificios específicamente escolares” (2008, p. 19). A medida que el país crecía, el Estado iba construyendo edificios públicos y ,entre ellos, edificios escolares, con intenciones de ordenar el espacio y “transmitir la importancia simbólica de las instituciones” (Barrán, 2008, p. 23).

Resulta interesante destacar el lugar que ocupa la preservación de una identidad cristalizada en los edificios escolares en cada uno de los libros analizados. Entendiendo que los edificios escolares construidos durante un período de tiempo constituyen parte del patrimonio de su país, la sistematización de estas obras arquitectónicas y la posibilidad de escribir sobre ello significa poder cristalizar su puesta en valor, conservación y preservación. Las escuelas construidas pueden ser consideradas patrimonio del siglo XX, en tanto representantes de una arquitectura generada a partir de una política de Estado de planificación masiva de establecimientos escolares, que se llevó a cabo contemporáneamente en países como Chile, Argentina, México, Brasil y Venezuela o en España (Torres Giles et al, 2015, p. 3).

Arquitectura y pedagogía en la trama del espacio escolar

Otro eje importante para pensar las formas en que se construye el objeto de investigación alrededor de las relaciones entre arquitectura y educación se vincula a las referencias pedagógicas en cada publicación.

Barrán se propone pensar “interacciones” entre aprendizaje, conocimiento y proyectos de espacios escolares en Uruguay, generar “paradigmas comunes entre arquitectura y educación” abonando a la idea de que “todo proyecto de arquitectura educativa tiene implícitas ideas pedagógicas y epistemológicas” (2008, p. 4). En este sentido, es posible detectar en este libro dicha intención, desde el título y la organización del contenido (según las diferentes teorías pedagógicas que acontecieron durante el siglo XX) hasta la forma de presentar los temas: se contextualiza el marco pedagógico y se analizan los proyectos arquitectónicos en relación a ese marco. En palabras del autor, “si bien muchas veces esta arquitectura ha seguido al pensamiento educativo, también los proyectos arquitectónicos han aportado nuevas ideas y posibilidades a la educación” (2008, p. 5). Por ejemplo, al abordar el caso de la escuela de Malvín, el autor encuentra allí relaciones entre los aportes de la arquitectura moderna europea y los postulados de la Escuela Nueva. Además de la importancia de pensar los edificios escolares entre disciplinas, Barrán propone recuperar las voces de los educadores, encontrar a los arquitectos con la comunidad educativa y desde allí pensar en conjunto.

En el caso chileno, las referencias son especialmente arquitectónicas. Si bien en algunos momentos se menciona la influencia que los discursos pedagógicos europeos generaron en la educación de su país, las relaciones con los edificios aparecen ligadas al marco legal y a la normativa. Los autores plantean que en los edificios estudiados miraron las características formales y espaciales, los postulados del movimiento moderno de la arquitectura y los modelos educativos de la época (Torres Giles et al., 2015, p. 5). En el análisis de los casos, manifiestan que los edificios fueron construidos contemplando los requerimientos pedagóg icos de cada época y describen los programas de los conjuntos escolares (cantidades y distribución).

En el caso mexicano, si bien quienes escriben provienen de diferentes campos disciplinares, es posible detectar planteos compartidos. Por ejemplo, la revisión de la historia del sistema educativo mexicano y el análisis de algunas relaciones entre las propuestas pedagógicas de cada época y los edificios escolares; la apuesta por el edificio escolar para mejorar la educación; y la participación de diferentes actores, entre otros arquitectos y pedagogos, en la construcción del edificio escolar.

Grementieri y Shmidt señalan que, aunque los edificios ocupan un lugar destacado al pensar en la escolarización, dentro de los componentes del sistema educativo argentino, la arquitectura para la educación es “el menos conocido y valorado por dirigentes, especialistas y público en general” (2010, p. 9), Al describir los edificios escolares intentan dar cuenta de los debates que acompañan la época, las políticas educativas y las relaciones con los Estados. En algunos momentos nombran postulados pedagógicos contemplados en los proyectos arquitectónicos analizados. Las referencias a un marco político pedagógico (tanto en lo legal como en lo administrativo estatal) están presentes en todas las obras analizadas, y en el análisis argentino es, por cierto, el elemento más recurrente.

En las cuatro publicaciones estudiadas, cuando se aborda los orígenes de los sistemas educativos, se hacen menciones al normalismo, al higienismo, al discurso médico y a la influencia del positivismo. Dichos elementos se presentan relacionados con los proyectos pedagógicos de la época y fueron también parte de las decisiones arquitectónicas en relación a iluminación, ventilación e higiene.

Reflexiones finales

Nos propusimos explorar las formas en que la arquitectura escolar como tema es identificada y construida en los últimos años, en publicaciones que surgen en el contexto latinoamericano. Se ha expuesto aquí una primera selección inductiva (y por ello quizás arbitraria) de cuatro casos en cuatro países. Los libros elegidos para estudiar la pregunta de nuestra investigación proponen recorridos singulares y toman caminos propios para analizar la arquitectura para la educación en cada país. En el intento de abordar este tema se hacen notable en los cuatro trabajos esfuerzos por generar un conocimiento abarcativo: sistematizar desarrollos, encontrar puntos comunes, indagar en los casos extraordinarios.

Con enfoques singulares, observamos que en las cuatro investigaciones el modo de enunciar la arquitectura escolar como objeto se combina de diferentes maneras con variados recursos gráficos (geometrales, fotografías, tablas, etc.). Realizamos este trabajo desde la mirada de la arquitectura y la pedagogía, como una construcción conjunta en el encuentro entre disciplinas. En estos cruces, el uso de diferentes lenguajes significa un desafío y abre la posibilidad de entablar perspectivas comunes. Describir un lugar a partir de palabras puede ser una manera de transmitir la dimensión arquitectónica a quienes no están habituados a los geometrales. Desde las ciencias sociales, estos otros modos de representación, una vez comprendidos, enriquecen las interpretaciones. Quizá sea este un punto característico al elegir una forma de estudiar la arquitectura escolar.

Además de la combinación de lenguajes, encontramos en los cuatro libros el diálogo con otras disciplinas (historia, pedagogía, psicología, política educativa). Nos detuvimos en la relación entre escuela, Estado, arquitectura y el proceso de construcción de edificios escolares. Dicha relación cobra fuerza a fines del siglo XIX y durante el siglo XX, cuando en muchos países de nuestro continente se produce un proceso de escolarización masiva regulado por los Estados nacionales. La fuerte presencia del Estado en materia educativa durante el siglo XX influyó significativamente en la configuración de una arquitectura escolar en cada territorio. Analizamos en ese entramado los diálogos entre arquitectura y pedagogía, y si bien estas reflexiones quedan supeditadas al punto de partida de cada publicación, podría pensarse, por ejemplo, que las investigaciones argentina y chilena parten de un acento principalmente disciplinar, para establecer cruces entre la teoría y la historia de la arquitectura: mirar las escuelas desde la arquitectura en diálogo con búsquedas desde las ciencias sociales de más larga tradición. En la publicación mexicana se parte de asumir a la arquitectura en la trama de las ciencias sociales, poniendo el foco en el edificio como tal. Y en el caso uruguayo, la articulación arquitectura-pedagogía opera como un modo de entender el proceso educativo en el país y de comprender decisiones proyectuales.

Las publicaciones seleccionadas coinciden en la problematización del tema a escala nacional y en perspectiva histórica, integrando aproximaciones hasta entonces inscriptas en el estudio de una obra, un arquitecto, un organismo, una gestión de gobierno o un período en particular. Desde este lugar significan un valioso aporte para seguir profundizando y abonando a la arquitectura escolar como problemática latinoamericana, habilitando futuros abordajes, sumatoria de casos y cruces disciplinares.

Referencias bibliográficas

Arañó, A. (Ed.) (2011). Arquitectura Escolar. SEP 90 AÑOS. México D.F, México: Secretaría de Educación Pública (SEP) y Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (CONACULTA). Barrán Casas, P. (2008). Interacciones entre las prácticas proyectuales y las ideas educativas en el Uruguay moderno y contemporáneo. Montevideo, Uruguay: Universidad de la República.

Barrán Casas, P. (2008). Interacciones entre las prácticas proyectuales y las ideas educativas en el Uruguay moderno y contemporáneo. Montevideo, Uruguay: Universidad de la República.

Barrán Casas, P. (2020). La sistematización de la arquitectura escolar pública. Orígenes, difusión internacional y Desarrollo en el Río de La Plata (1955-1973) (Tesis doctoral) Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo, Universidad de la República, Uruguay. Disponible en: http://www.fadu.edu.uy/sepep/tesis/la-sistematizacion-de-la-arquitectura-escolar-publica-origenes-difusion-internacional-y-desarrollo-en-el-rio-de-la-plata-1955-1973/.

Cattaneo, D. y Espinoza, L. (2018). Arquitectura escolar e historia. Repaso sobre enfoques, problemas y proyectos. En Ponencia VIII Encuentro de Docentes e Investigadores en Historia del Diseño, la Arquitectura y la Ciudad. Córdoba. Chiurazzi, T. (2007). Arquitectura para la educación. Educación para la arquitectura. En R. Baquero G. Diker, G. Frigerio (comps.), Las formas de lo escolar (pp. 45-58). Buenos Aires, Argentina: Del Estante editorial.

Chiurazzi, T. (2007). Arquitectura para la educación. Educación para la arquitectura. En R. Baquero G. Diker, G. Frigerio (Comps.), Las formas de lo escolar (pp. 45-58). Buenos Aires, Argentina: Del Estante editorial.

Galván Lafarga, L.E. (2011). Antecedentes de la Arquitectura Escolar, 1821- 1921. En A. Arañó (Ed.), Arquitectura Escolar. SEP 90 AÑOS (pp. 26-35). México D.F, México: Secretaría de Educación Pública (SEP) y Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, (CONACULTA).

Grementieri, F. y Shmidt, C. (2010). Arquitectura, educación y patrimonio. Argentina 1600 – 1975. Buenos Aires, Argentina: Pamplatina.

Ortega Ibarra, C. y Dussel, I. (2019). Espacio y escuela en perspectiva histórica: Aportes latinoamericanos. Revista Anuario Historia de la Educación de la SAHE, 20(1), 6-10.

Porter, L. (2011). Arquitectura escolar y sociedad. En A. Arañó (Ed.), Arquitectura Escolar. SEP 90 AÑOS (pp. 17-25). México D.F, México: Secretaría de Educación Pública (SEP) y Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, (CONACULTA).

Puiggrós, A. (1994). Imaginación y crisis en la educación latinoamericana. Buenos Aires, Argentina: REI Argentina S.A., Instituto de Estudios y Acción Social, Aique Grupo Editor S.A.

Serra, M.S. (2017). Escuelas sin muros. Disputas sobre el espacio escolar y su capacidad performativa. En M. Serra, P. Pineau y M. Southwell (ed). La educación de las sensibilidades en la Argentina moderna. Estudios sobre estética escolar II (pp. 37-48). Buenos Aires, Argentina: Biblos.

Torres Giles, C.; Valdivia Ávila, S.; Atria Lemaitre, M. (2015). Arquitectura escolar pública como patrimonio moderno en Chile. Registro y análisis de las obras construidas por la Sociedad Constructora de Establecimientos Educacionales en la zona centro del país. 1937-1960. Santiago de Chile, Chile: Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Chile y Docomomo Chile.

Notas

[1] Resultan interesantes los debates sobre la pertinencia del uso de los términos arquitectura escolar e infraestructura escolar y sus especificidades (o no) en la práctica profesional arquitectónica. Ver Chiurazzi (2007).

Notas de autor

(*) María Florencia Serra. Profesora y licenciada en Ciencias de la Educación (UNR). Especialista en Proyecto, Planificación y Gestión de Arquitectura para la Educación (UNL). Doctoranda en Doctorado Ciencias de la Educación (FFyH-UNC). Becaria Doctoral de CONICET y docente en la cátedra de Pedagogía (FHyA-UNR).

Sus investigaciones giran en torno a la pregunta por los diálogos entre arquitectura y pedagogía. Integrante en equipos de investigación ligados al tema: “Configuraciones espaciales para la educación secundaria rural de las Escuelas de la Familia Agrícola” (UNL-UNR); “El derecho a la escolarización secundaria. Aportes para la (de) construcción de las condiciones de escolarización y el formato escolar” (UNC).

ORCID: 0000-0001-8665-9823

mfserra12@gmail.com

(**) Florencia Fernández Méndez. Arquitecta (FAPyD, UNR). Becaria doctoral de CONICET (2019-2024). Doctoranda en el doctorado en Arquitectura de la FAPyD-UNR. Su tema de investigación aborda la pregunta sobre el rol de la arquitectura y los espacios como ámbitos de prácticas educativas activas en clave proyectual, haciendo foco en proyectos contemporáneos en Argentina. Integrante del proyecto de extensión: “Diseño y Espacio educativo”, FCEIA (2019-2020). Integrante del equipo de investigación: “El espacio escolar contemporáneo. El caso del Programa 700 escuelas en la provincia de Santa Fe” FAPYD (2015-2018). Coordinadora académica y docente en workshops vinculados a las líneas de investigación en experiencias nacionales e internacionales (2015-2019).

ORCID: 0000-0003-0435-1652

arquitectafmendez@gmail.com

Información adicional

CÓMO CITAR: Serra, M. F. y Fernández Méndez, F. (2020). Arquitectura escolar en el siglo XX: aproximaciones desde cuatro publicaciones latinoamericanas recientes. A&P Continuidad, 7(13). https://doi.org/10.35305/23626097v7i13.285

Enlace alternativo

Modelo de publicación sin fines de lucro para conservar la naturaleza académica y abierta de la comunicación científica
HTML generado a partir de XML-JATS4R